¿Cómo saber qué fertilizante usar?
¿Cómo funcionan los fertilizantes en el suelo para ayudar al crecimiento de las plantas?
Como primera línea de defensa contra el agotamiento de los nutrientes, los fertilizantes ayudan a reponer los nutrientes esenciales del suelo. Proporcionan tres elementos principales que son cruciales para el crecimiento de las plantas: nitrógeno, fósforo y potasio.
Nitrógeno
El nitrógeno, el primero de los tres ingredientes principales, es muy importante para el crecimiento de las plantas. Se utiliza para construir proteínas, que son los componentes básicos de todas las células de las plantas. El nitrógeno también ayuda con la producción de hojas y tallos.
Fósforo
El fósforo es un nutriente importante que estimula el desarrollo de las raíces y la resistencia de las plantas. También es importante para las plantas que florecen y fructifican.
Potasio
El último de los tres ingredientes principales, el potasio ayuda a regular el agua en las plantas. Este nutriente puede ayudar a regular las tasas de transpiración, la fotosíntesis y la actividad enzimática.
¿Qué tipos de fertilizantes hay en el mercado?
Hay muchos tipos diferentes de fertilizantes en el mercado y puede ser confuso saber cuál elegir. Su vivero o tienda de jardinería local puede ayudarlo a determinar qué tipo de fertilizante es mejor para sus necesidades. Ellos podrán sugerirte un alimento básico para plantas, compost orgánico u otro tipo de fertilizante que sea perfecto para tus plantas.
Abono
El compost es un tipo de fertilizante que se compone de materiales orgánicos, como hojas, recortes de césped y restos de comida.
Estiércol
El estiércol es un tipo de fertilizante que se compone de desechos animales.
Harina de huesos
La harina de huesos es un tipo de fertilizante que se elabora a partir de huesos de animales. Tiene un alto contenido de fósforo, lo que ayuda a que las plantas crezcan fuertes y sanas.
Harina de sangre
La harina de sangre es un tipo de fertilizante que se elabora a partir de la sangre de animales. Tiene un alto contenido de nitrógeno, lo que ayuda a que las plantas crezcan verdes y saludables.
Extracto de algas
Las algas son un componente importante en la agricultura ecológica, ya que son ricas en minerales y aminoácidos. También contiene hormonas de crecimiento naturales.
Sulfato de amonio
El sulfato de amonio es un tipo de fertilizante con alto contenido de nitrógeno. Algunos cultivos comunes que tienen una alta eliminación de nitrógeno son el maíz, la soja y la alfalfa.
Cloruro de potasio
El cloruro de potasio es un tipo de fertilizante con alto contenido de potasio. Algunos cultivos comunes que tienen una alta necesidad de potasio son los tomates, las papas y los cítricos.
Fosfato monoamónico
El fosfato monoamónico es un tipo de fertilizante con alto contenido de fósforo. El fósforo ayuda a las plantas a realizar la fotosíntesis, producir semillas y resistir enfermedades.
Urea
La urea es un tipo de fertilizante con alto contenido de nitrógeno. La urea también es muy asequible, lo que la convierte en una opción popular para los agricultores.
Consejos para la aplicación de fertilizantes
Cuando se trata de fertilizar tus plantas, hay algunas cosas que debes tener en cuenta. Aquí hay algunos consejos y trucos sobre cómo aprovechar al máximo su fertilizante:
Aplique fertilizantes temprano en la mañana o tarde en la noche, cuando el sol no es tan fuerte. Esto ayudará a evitar que el fertilizante queme las hojas de tus plantas.
Riega tus plantas antes de aplicar el fertilizante, para que las raíces puedan absorber los nutrientes más fácilmente.
Aplica fertilizante en un patrón circular alrededor de la base de tus plantas. Esto ayudará a asegurar que el fertilizante se distribuya uniformemente.
Siga cuidadosamente las instrucciones de la etiqueta. Cada tipo de fertilizante tiene unos requisitos diferentes, y no seguirlos podría dañar tus plantas.
¡Ten paciencia! Pueden pasar algunas semanas hasta que el fertilizante haga efecto
La importancia de utilizar productos orgánicos en tus plantas
Si bien los productos orgánicos son más caros que los productos cultivados convencionalmente, existen muchas razones por las que vale la pena el costo adicional.
La agricultura orgánica requiere más mano de obra que la agricultura convencional y también requiere más tiempo para que los cultivos maduren. Esto se debe a que los agricultores orgánicos no usan pesticidas ni fertilizantes químicos, que matan insectos y aceleran el crecimiento de las plantas.
Hay muchas personas que creen que los productos orgánicos saben mejor que los productos cultivados convencionalmente. Sin embargo, no hay evidencia científica que respalde esta afirmación. De hecho, un estudio realizado por la Universidad de California-Davis descubrió que las personas no podían distinguir la diferencia entre los tomates orgánicos y los convencionales cuando se les hacía una prueba de sabor a ciegas.
La agricultura orgánica tiene más que ver con el medio ambiente que con el sabor. Sin embargo, a pesar de su alto costo, la gente los compra ya que los productos orgánicos se cultivan sin el uso de pesticidas y productos químicos peligrosos.
La agricultura orgánica es cada vez más popular y, a medida que crece la demanda de productos orgánicos, también crece la demanda de cultivos orgánicos. A la larga, podemos esperar ver incluso a más agricultores que se cambien a lo orgánico.
En Conclusión
Hay muchos tipos diferentes de fertilizantes que se hacen para muchos propósitos diferentes, por lo que es importante consultar a su vivero o tienda de jardinería local para obtener ayuda. Ellos podrán sugerir el tipo correcto de fertilizante para sus necesidades, ya sea un alimento básico para plantas, abono orgánico o cualquier otra cosa. La agricultura ecológica también tiene su lugar en la sociedad y tiene muchos beneficios frente a la agricultura convencional. ¡El costo adicional a menudo vale la pena al final!